El proyecto hotelero se concibe como un refugio de bienestar y sanación, donde la arquitectura se convierte en un puente entre el ser humano, la tierra y la memoria cultural.
Inspirado en un estilo Mediterráneo tropicalizado, el diseño integra referencias prehispánicas y wabi-sabi, fusionando la sobriedad tectónica con la riqueza sensorial del entorno mexicano.
La arquitectura se concibe como una serie de espacios diseñados para acompañar las etapas de sanación del cuerpo, inspirados en la metodología Bhūmi, donde cada lugar del recorrido activa un proceso específico: purificación, contención, introspección, liberación y renacimiento. Desde la tectónica, se integran materiales naturales como el barro, el estuco y la madera en estado crudo, capaces de regular la humedad, absorber la energía corporal y activar la sensibilidad háptica.
El interiorismo wabi-sabi acoge la imperfección como parte del proceso terapéutico, ofreciendo al cuerpo texturas orgánicas, sombras suaves y vacíos contemplativos que permiten descansar el sistema nervioso.
Cada espacio está pensado para estimular una respuesta somática específica:
Recepción (enraizamiento corporal)
Zona húmeda o de baños (liberación y limpieza)
Áreas de contemplación (introspección sensorial)
Habitaciones (reconexión y descanso fisiológico)
Áreas exteriores (expansión, respiración y renovación)
Título | Precio | Estado | Tipo | Superficie | Uso | Habitaciones | Baños |
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